¡Hola, #ChicaValmy! Amamos el maquillaje tanto como tú, nos encanta probar y jugar con sombras, bases, polvos y demás. La parte no tan divertida llega al momento de limpiar todos nuestros instrumentos, sin embargo, esto es súper importante si queremos mantenerlos en buen estado. 

Las brochas de maquillaje anidan células muertas, polvo, aceite y bacterias que pueden causar enfermedades en la piel. Además, el uso constante y el descuido puede deteriorarlas rápidamente, perjudicando el acabado final de tu rostro. ¿Tienes un buen juego de brochas y quieres asegurarte de que te acompañe durante mucho tiempo? Entonces sigue nuestros consejos: 
1. Lavado

Lava tus brochas aplicando un jabón neutro o champú para niños y enjuagando con agua tibia. También, puedes sumergirlas por algunos minutos en una mezcla de agua, jabón y unas gotas de aceite de árbol de té, dejarlas reposar en la mezcla unos minutos y retirar con agua.

Para que salga todo el exceso de maquillaje, masajea las cerdas de la brocha suavemente y gírala sobre la palma de tu mano o sobre alguna superficie con textura hasta que el agua salga completamente clara.

2. Secado

Sécalas con una toalla limpia y luego déjalas reposar en un sitio donde reciban aire fresco. No las pongas boca abajo porque esto puede debilitar las cerdas, ni boca arriba porque el agua se acumulará en la base del mango, oxidándose o pudriendo el pegamento.

3. Guardado

Una vez secas, guárdalas en un estuche o funda especial solo para ellas. No la dejes sueltas junto a otros productos de maquillaje que las puedan ensuciar y evita dejarlas en espacios húmedos y cerrados ya que esto favorece la aparición de hongos y bacterias.

4. Tip importante

Recuerda que las esponjas y brochas son de uso personal, no deberías usar otras que no sean las tuyas o prestarlas a diferentes personas. 

5. El gran final

Te dejamos un truco que evitará que las cerdas de tus brochas se enreden o se desprendan mientras te maquillas: como paso final de la limpieza, peinalas con un peine de dientes finos limpio. Aunque esto no es obligatorio, es un buen tip que dejará a tus brochas luciendo como recién salidas de su empaque por mucho tiempo. 

Recuerda lavar tus brochas al menos una vez al mes y cuéntanos si aplicas estos consejos. ¡Hasta la próxima!